Un poco de poesía para mis amigos abogados. Aquí va un poema de Rubén Darío que atañe al ejercicio de la profesión. Cualquier asimilación a la realidad es pura coincidencia.
Diz que dos gatos de Angora
en un mesón se metieron,
del cual sustraer pudieron
un rico queso de bola.
Como equitativamente
no lo pudieron partir,
acordaron recurrir
a un mono muy competente.
Mono de mucha conciencia
que gran fama tenía,
porque el animal sabía
toda la jurisprudencia.
"Aquí tenéis -dijo el gato
cuando ante el mono se vio-
lo que este compadre y yo
hemos robado hace un rato;
y pues de los dos ladrones
es el robo, parte el queso
en mitades de igual peso
e idénticas proporciones".
Aquel mono inteligenteobserva el queso de bola,
mientras menea la cola
muy filosóficamente.
-"Voy a dividir el queso
y, por hacer lo mejor,
rectificaré el error,
que hubiere, con este hecho".
Por ni suscitar agravios,
saca el mono una balanza,
mientras con dulce esperanza
se lame el gato los labios.
Haz buen mono como quieras
dijo el gato con acento
mientras tomaba asiento
sobre sus patas traseras.
Valiéndose de un cuchillo,
el mono el queso partió,
y en seguida colocó
un trozo en cada platillo;
pero no estuvo acertado
al hacer las particiones,
y otras dos oscilaciones,
se inclinó el peso hacia un lado.
Para conseguir mejor
la proporción que buscaba
de los trozos que pesaba,
le dio un mordisco al mayor;
Pero como fue el bocado
mayor que la diferencia
que se dio, en la otra experiencia
se vio el mismo resultado.
Y así, queriendo encontrar
la equidad que apetecía,
los dos trozos se comía
sin poderlos nivelar.
No se pudo contener
el gato, y prorrumpió así:
-"Yo no traje el queso aquí
para vértelo comer".
Dice el otro con furor,
mientras la cola menea:
-"Dame una parte, ya sea
la mayor o la menor
que estoy furioso y arguyo
al ver lo que va pasando
que por lo nuestro mirando
tu estás haciendo lo tuyo.
El juez habla de este modo
a los pobres litigantes:
-"Hijos, la justicia es antes
que nosotros y que todo".
Y otra vez a pesar,
y otra vez a morder,
los gatos a padecer
y la balanza a oscilar.
Y cuando del queso aquel
quedan tan pocos pedazos
que apenas mueven los brazos
de la balanza en el fiel,
el mono se guarda el queso
y a los gatos les responde:
-"Esto a mí me corresponde
por los gastos del proceso".
Muy bueno, original, pero HDP ponete a laburar en horario de oficina.
ResponderEliminarmuy bueno, un abrazo
ResponderEliminarjajaja buenisimo..
ResponderEliminarpaso
te firmo
effeame
mui bonitho0o gatitho0o jaja
ResponderEliminarMuy bueno
ResponderEliminarHijo de puta
Eliminarno digas palabrotas
Eliminarcon esto ponems nuestra mente a analizar mas de alla d la propia plbra [analizar]
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