martes, 25 de mayo de 2010

Gracias por todo

25 de mayo, nuevo cumpleaños de la Patria. Desperté temprano, Sole aún duerme en el cuarto. Salí a la terraza, fijé la mirada y vi a Buenos Aires desde el Abasto, un nuevo día comenzaba otra vez.

Hice el desayuno, y mientras pensaba una melodía vi, de repente, pasar por mi cabeza, una nube blanca con un cartel que decía: ¡saludá a la Patria carajo, que es su cumpleaños!

Vine hasta la compu y me puse a pensar. No me salía nada. Improvisé.

¡Feliz cumpleaños, querida amiga! Tantas noches pensando en vos y hoy, que ha llegado el día, no tengo la valentía de decirte lo que pienso.

De cuánto añoro verte triunfante, de que me muero por tu grandeza, de cuánto sufro cuando padeces una estocada.

Hoy si me dejas, quiero decirte: gracias por todo.

Por el mar y por las montañas. Por tus praderas, por tus caminos, por la belleza de tus paisajes.

Por la cultura que poco a poco fuiste forjando en estas tierras. Por el folclore, por tus poetas, que cantan loas de tus hazañas, capaz por ello la madre selva y la Pachamama, son residentes de tus entrañas.

Gracias por todo, querida amiga, y Feliz cumpleaños.

lunes, 8 de marzo de 2010

Abrazo a la salud

Desde este pequeño espacio de la red quiero hoy brindar todo mi apoyo a los trabajadores del hospital porteño Pedro Lagleyse.

El Lagleyse se trata de un hospital escuela modelo, especializado exclusivamente en oftalmología, que ha brindado a la ciudad profesionales de excelencia y una dedicación absoluta a la salud de la comunidad.

Este hospital, que recibe un total de 1000 pacientes por día, hoy sufre el abatimiento de Mauricio Macri que, en desmedro de la salud de los habitantes de la ciudad, desde un primer momento buscó cualquier excusa para cerrarlo,y hoy encuentra en la lamentable desgracia que ha acontecido en la ciudad -léase inundaciones- respecto de las cuales éste comparte responsabilidad con los demás gobernantes que estuvieron al frente de la ciudad, la excusa perfecta para volver a atacar a esta prestigiosa institución y proceder a su cierre definitivo, utilizando la ridícula carátula de "cierre preventivo".

Este acto constituye una muestra más de cuánto le interesa al Sr. Jefe de Gobierno la salud de sus habitantes: NADA.

Todo ello debe llevarnos a un punto de reflexión sobre el destino que queremos dar a nuestro país. Yo, por lo pronto, tengo muy en claro que el mío bajo ninguna circunstancia va a estar de lado de este señor que en sus pocos años de gobierno ha demostrado un abierto desprecio por la educación y la salud pública.

domingo, 7 de marzo de 2010

Sobre la política económica

Conforme surge claramente de la Constitución Nacional, es el Poder Legislativo, en nuestro caso el Congreso de la Nación, quien debe definir la política económica de la República y no el Poder Ejecutivo, como erróneamente surge en reiteradas ocasiones de los discursos de nuestros presidentes.

Lo cierto es que la CN es clara al respecto. En este sentido, en su art. 4 dispone que será el Congreso provee a los gastos de la Nación con los empréstitos y operaciones de crédito que éste decrete en casos de urgencia o para empresas de utilidad nacional.

A su vez, el art. 75 de nuestra carta magna en sus distintos incisos, al establecer las principales atribuciones del Congreso de la Nación dispone que corresponde al Congreso:

Inc. 4: Contraer empréstitos sobre el crédito de la Nación.

Inc. 8. Fijar anualmente, conforme a las pautas establecidas en el tercer párrafo del inciso 2 de este artículo, el presupuesto general de gastos y cálculo de recursos de la administración nacional, en base al programa general de gobierno y al plan de inversiones públicas y aprobar o desechar la cuenta de inversión.

Inc. 18. Proveer lo conducente a la prosperidad del país, al adelanto y bienestar de todas las provincias, y al progreso de la ilustración, dictando planes de instrucción general y universitaria, y promoviendo la industria, la inmigración, la construcción de ferrocarriles y canales navegables, la colonización de tierras de propiedad nacional, la introducción y establecimiento de nuevas industrias, la importación de capitales extranjeros y la exploración de los ríos interiores, por leyes protectoras de estos fines y por concesiones temporales de privilegios y recompensas de estímulo.

Inc. 19. Proveer lo conducente al desarrollo humano, al progreso económico con justicia social, a la productividad de la economía nacional, a la generación de empleo, a la formación profesional de los trabajadores, a la defensa del valor de la moneda, a la investigación y al desarrollo científico y tecnológico, su difusión y aprovechamiento.
Proveer al crecimiento armónico de la Nación y al poblamiento de su territorio; promover políticas diferenciadas que tiendan a equilibrar el desigual desarrollo relativo de provincias y regiones. Para estas iniciativas, el Senado será Cámara de origen.
Sancionar leyes de organización y de base de la educación que consoliden la unidad nacional respetando las particularidades provinciales y locales; que aseguren la responsabilidad indelegable del Estado, la participación de la familia y la sociedad, la promoción de los valores democráticos y la igualdad de oportunidades y posibilidades sin discriminación alguna; y que garanticen los principios de gratuidad y equidad de la educación pública estatal y la autonomía y autarquía de las universidades nacionales.
Dictar leyes que protejan la identidad y pluralidad cultural, la libre creación y circulación de las obras del autor; el patrimonio artístico y los espacios culturales y audiovisuales.

El sistema entonces se va delimitando claramente. En materia económica es el Congreso de la Nación quien asume los rieles. El Poder Ejecutivo en nuestro sistema republicano se encuentra limitado a ser el brazo ejecutor del Estado, pero las decisiones trascendentes para la Patria las toma el Congreso de la Nación, el cual se trata del principal de los poderes en un Estado Federal, ya que allí es donde se encuentran representados el pueblo de la Nación y las Provincias.

Pero como si los artículos citados no fueran tajantes en cuanto a lo que venimos refiriendo, la cuestión fue confirmada por los constituyentes de 1994, quienes incorporaron el art. 85 de la CN, que introduce una nueva figura en el juego de poderes, la Auditoría General de la Nación. El art. citado establece: “El control externo del sector público nacional en sus aspectos patrimoniales, económicos, financieros y operativos, será una atribución propia del Poder Legislativo. El examen y la opinión del Poder Legislativo sobre el desempeño y situación general de la administración pública estarán sustentados en los dictámenes de la Auditoría General de la Nación. Este organismo de asistencia técnica del Congreso, con autonomía funcional, se integrará del modo que establezca la ley que reglamenta su creación y funcionamiento, que deberá ser aprobada por mayoría absoluta de los miembros de cada Cámara. El presidente del organismo será designado a propuesta del partido político de oposición con mayor número de legisladores en el Congreso.
Tendrá a su cargo el control de legalidad, gestión y auditoría de toda la actividad de la administración pública centralizada y descentralizada, cualquiera fuera su modalidad de organización, y las demás funciones que la ley le otorgue.
Intervendrá necesariamente en el trámite de aprobación o rechazo de las cuentas de percepción e inversión de los fondos públicos”
.

Son muchas las conclusiones que podemos extraer entonces de los párrafos que preceden:

1. Por un lado, solo el Congreso de la Nación se encuentra habilitado constitucionalmente para decidir sobre la política económica tanto a nivel interno como internacional, ya sea cuando se trate de adquirir deuda o de pagarla.

2. El Poder Ejecutivo, tal como está regulado en la CN no es un poder que represente al pueblo de la Nación, como pretenden aquellos que buscan darle popularidad a un gobierno, sino que es el Congreso de la Nación quien representa y toma las decisiones. El Poder Ejecutivo, salvo en limitadas ocasiones puede tomar decisiones sin la anuencia del Congreso.

Estas son las pautas que, a grandes rasgos, debemos tener en cuenta al momento de analizar los discursos presidenciales sobre la política económica de la Nación. Es falso que sea el Poder Ejecutivo el que decida sobre su rumbo económico. Vemos entonces que no hace falta ser un erudito en la materia para poder llegar a las conclusiones apuntadas. Basta solo con leer la CN. El problema es que al parecer nuestros gobernantes o nunca la leyeron, o hacen caso omiso a sus postulados.

lunes, 1 de marzo de 2010

Seis años antes del bicentenario

La rica historia de nuestro país se encuentra muchas veces plagada de errores conceptuales que, si bien pueden advertirse con facilidad, nunca se llegó a un final feliz a su respecto.

Lo cierto es que uno de esos severos errores se encuentra constituido por el hecho de considerar al 2010 como el año del bicentenario argentino, cuando la realidad indica, sin restar importancia a los grandes revolucionarios de mayo, que el bicentenario argentino debería celebrarse el 9 de julio de 2016, cuando se cumplan 200 años de la independencia argentina.

Cabe recordar que la gloriosa semana de mayo de 1810 concluyó con una Junta de Gobierno que se proclamó representante de Fernando VII y de la Junta de Cádiz. En aquél entonces el reino de España había caído en manos de Napoleón, quien coronó a su hermano José como Rey de España y encerró a Fernando VII en la ciudad de Bayona, de la vecina Francia.

Largo fue el camino que nuestra Patria debió recorrer hasta llegar a la independencia, la que fue declarada el 9 de julio de 1816, seis años después del primer “gobierno patrio”, habiendo quedado consolidada parcialmente recién en el año 1853 con el dictado de la Constitución Nacional y finalmente en 1860 con la incorporación de la Provincia de Buenos Aires.

Desde entonces, nuestro país se encuentra en guerra consigo mismo. Nunca hemos sido capaces de superar nuestras diferencias. Tanto el interior profundo como el porteño de barrio muchas veces equivocan la concepción que tienen unos de otros.

Son tan pocas las cosas que debemos cambiar para que el verdadero cambio acontezca. Podemos empezar por mirarnos como iguales y tratar por fin de iniciar una pacífica convivencia en nuestras tierras.

Entonces, por qué seis años antes de nuestro bicentenario como Nación, no comenzamos a trabajar para que las cosas funcionen. Para reducir el hambre solo tenemos que volver a sembrar nuestras tierras. Para acabar con la pobreza debemos salir a las calles y dar una mano. Para tener una salud y una educación de excelencia debemos pagar nuestros impuestos y exigir a nuestros gobernantes que nos rindan cuentas por su administración y no que ellos vengan a buscarnos a nosotros.

Exigir a quienes nos gobiernan seriedad e idoneidad, es la única forma de poder salir adelante, de poder alcanzar el bicentenario con la frente bien alta, como el próspero país que supimos ser.

Acaso no fue un argentino el que una vez dijo que “…todos los incurables tienen cura cinco segundos antes de su muerte”. Nosotros tenemos 6 años todavía para salir de este letargo y tratar alcanzar la tan ansiada unión nacional proclamada por el Preámbulo de nuestra Constitución y de esta manera rendirle un verdadero homenaje a la Patria en el año de su bicentenario.

viernes, 19 de febrero de 2010

NOTICIA DE ULTIMO MOMENTO



Diputados oficialistas de la legislatura porteña se encontrarían a punto de votar un proyecto de ley propuesto por Mauricio Macri, con el objetivo de crear una nueva fuerza en la ciudad: los “bañeros metropolitanos”.

De acuerdo a fuentes oficiales, el jefe de gobierno porteño ya se habría comunicado con Emilio Disi para que tome a su cargo el armado del equipo. Al parecer proveerán con un gomón a cada CGP de la ciudad.

Distintos diputados de la oposición, arguyen que el proyecto es erróneo, ya que lo correcto a su criterio sería proceder a la expropiación de todos los gomones que pertenecen a la puta oligarquía.

Por lo pronto, denuncian trabajos de inteligencia con los guardavidas piqueteros de la Costa.


*foto extraída de la página web www.clarin.com.ar